sábado, 6 de noviembre de 2010

El jardinero y el Forastero

Esta es una buena historia, si bien es muy estilo de superación personal no deja de ser un muy buen escrito y una historia interesante. por cierto la historia esta completa.



La escena es imponente, toda la tierra aparece blanca, cubierta de un grueso manto de nieve, no hay ni una hierba, ni un árbol que permitan al viajero recordar que aquellas cosas existen; sólo la blancura perdiéndose en el horizonte.
 Desde lejos el viajero se destaca como un punto negro en aquella inmensidad, pequeño, solo.
 Pero acerquémonos a él, algo muy importante lo debe haber llevado hasta este paraje, una fuerza superior lo debe sostener pues sólo un corazón muy valiente puede atreverse a enfrentar esta soledad.
 Escuchemos lo que piensa; unámonos a él en este difícil peregrinaje.
 - Dame fuerzas Dios mío, no me abandones, muchos días llevo en este sendero y sólo encuentro soledad, frío, desesperación. ¿Me habré equivocado de camino? ¿Me habrá engañado la voz que escuché? Mi visión cada vez se acorta más, la niebla y el viento blanco me cierran el paso, pero mi determinación está tomada, si no encuentro lo que busco, aquí me quedaré. Cuando se ha visto por un instante la luz, ya no se puede vivir sin ella.